La copa menstrual es un producto con forma de copa (de ahí su nombre) que se introduce en la vagina en los días de menstruación para que el sangrado menstrual quede recogido en el interior de la copa.
No obstante, la copa menstrual no se lleva constantemente dentro de la vagina durante todos los días que dure la menstruación, sino que debe sacarse cuidadosamente cada 12 horas (como máximo) para vaciar el flujo menstrual que ha recolectado. Así, la mujer podrá vaciar la copa, enjuagarla y, seguidamente, puede volverla a introducir.
Existen diferentes modelos y están disponibles en varias tallas, para que la mujer pueda elegir la que mejor se adapte a su situación.
¿Cómo se coloca la copa menstrual?
Habitualmente, la copa menstrual trae unas instrucciones detalladas para su uso, que se deben leer. Sin embargo, de modo general, para introducir y colocar correctamente la copa menstrual en el canal vaginal, se deben seguir las siguientes indicaciones:
- Esterilizar la copa menstrual antes de utilizarla por primera vez y antes de usarla en cada ciclo menstrual. Para ello, se debe introducir en agua hirviendo durante 3-5 minutos. Por supuesto, se debe esperar a que la copa menstrual se enfríe antes de introducirla en el canal vaginal. Algunas copas menstruales vienen con un vaso esterilizador para su esterilización.
- Lavarse las manos cuidadosamente.
- Adoptar una postura cómoda: en el suelo en cuclillas, sentada en el inodoro…
- Doblar la copa menstrual. Hay varios tipos de dobleces que pueden realizarse para introducir de manera más cómoda la copa menstrual, como el doble en forma de C.
- Introducir la copa doblada en el canal vaginal, ligeramente inclinada hacia atrás (hacia el culete), hasta que quede dentro de la vagina en su totalidad. La copa menstrual puede mojarse ligeramente (o utilizar un lubricante con base acuosa) para que resulte más cómodo introducirla. Hay que tener también en cuenta que la copa menstrual no se introduce de manera tan profunda como un tampón, sino que debe quedar más baja (sin que sobresalga ninguna parte al exterior).
- Verificar que no se ha quedado plegada. Cuando se coloca la copa, lo habitual es que se abra por sí misma. Sin embargo, es una buena idea comprobarlo recorriendo con el dedo la base de la copa, para ver si se detecta algún doblez que indique que no se ha abierto correctamente. Otra comprobación puede ser tirar suavemente del tirador hacia abajo y, si la copa no se mueve, es porque está bien colocada y se ha hecho el vacío que evitará posibles fugas.
Las primeras veces puede resultar complicado y pueden ser necesarios varios ciclos menstruales para aprender a utilizarla correctamente, pero una vez que la mujer ha adquirido práctica, colocarla es sencillo. Además, si la copa menstrual está bien colocada, no produce molestias.
¿Cómo se debe hacer para sacar la copa menstrual?
Como ya se ha mencionado con anterioridad, la copa menstrual se debe sacar de la vagina (para vaciar el flujo menstrual que ha recogido) como máximo cada 12 horas. De hecho, si el flujo menstrual es abundante, la mujer necesitará vaciar la copa menstrual cada menos tiempo (unas 6 horas).
Los pasos para sacar de manera adecuada y sin hacerse daño la copa menstrual son los siguientes:
- Lavarse bien las manos.
- Ponerse en una postura cómoda y relajada.
- Introducir el dedo índice y el pulgar a modo de pinza en el canal vaginal.
- Pinzar la base de la copa, no el tirador. De este modo, se romperá el vacío que mantenía la copa menstrual en su sitio.
- Sacar la copa tirando ligeramente de la base hacia abajo (con cuidado para no verter el fluido menstrual que contiene).
¿Se puede usar la copa menstrual durante las relaciones sexuales?
No, lo habitual es que no se utilice la copa menstrual mientras se mantienen relaciones sexuales con penetración.
Además, es importante conocer que la copa menstrual no tendría función como anticonceptivo. Por otro lado, la copa menstrual tampoco protege de las enfermedades de transmisión sexual (ETS), para lo que se debe usar un método anticonceptivo de barrera como el preservativo.
Ventajas de la copa menstrual
Si la comparamos con el uso de tampones y compresas, la copa menstrual tiene muchísimas ventajas.
– Protege la flora vaginal: Al contrario de los tampones, recoge el flujo menstrual en vez de absorberlo, por lo que protege la flora vaginal.
– No contiene productos químicos: La copa menstrual no contiene agentes blanqueadores (utilizados para blanquear el algodón de los tampones) ni materias químicas agresivas como lejía o cloro que, con el uso continuado, pueden alterar el pH de los órganos genitales de la mujer.
– Es cómoda: No se mueve, no se nota y no se ve. Una vez introducida en la vagina, la copa se adapta perfectamente a las paredes vaginales y queda firmemente sujeta sin que notes nada.
– Realizar actividades físicas: Puedes realizar cualquier ejercicio, incluso, los que requieran gran movilidad.
– Dura mucho más que un tampón: Tú misma irás comprobando con cuanta frecuencia necesitas vaciarla, dependiendo del día del ciclo en el que te encuentras.
– Utilización prolongada: Puedes utilizarla hasta 12 horas seguidas, por lo que no necesitas llenar tu bolso con recambios de compresas o tampones. Además, puedes usarla también durante la noche.
– Sin olores: No huele a nada ni absorbe olores porque no está en contacto con el aire.
Desventajas de la copa menstrual
Hay una serie de inconvenientes que también merece la pena tener en cuenta.
– Uso incómodo en sitios públicos: Si tienes que cambiarte la copa menstrual en lugares públicos (restaurantes, trabajo, etc.) puede ser un fastidio porque deberás lavarla y enjuagarla en el lavabo.
– Esterilización: Antes de cada menstruación, debes esterilizarla para asegurarte de que está libre de bacterias. Además, como ya te hemos comentado, se tiene que lavar antes y después de cada colocación.
– Colocación: Puede resultar un tanto complicada de colocar, sobre todo al principio. Es importante colocar la copa menstrual correctamente para que mantenga bien la sangre y no te manches.
– Uso de las manos: Para extraer la copa necesitas introducir las manos en tu vagina para sacarla correctamente. Este paso puede ser un problema para las mujeres que estáis acostumbradas a usar aplicador.
– Puede manchar: Cada vez que saques la copa menstrual para vaciarla, tendrá sangre en el interior y puede ser que te manches.
– Podrías ser alérgica al material. La mayoría de las copas menstruales están hechas de materiales libres de látex, por lo que es una gran opción para las personas con alergias a este material. Pero para algunas personas, existe la posibilidad de que el material de silicona o caucho pueda causarles una reacción alérgica.
– Puede causar irritación vaginal. Una copa menstrual puede irritar la vagina si no se limpia y se cuida adecuadamente. También puede causar molestias si introduces la copa sin lubricación.
– Puede haber una mayor probabilidad de infección. Lava muy bien la copa menstrual y deja que se seque.
¿Quién puede utilizar la copa menstrual?
Esta es una de las preguntas frecuentes que solemos recibir en las consultas de ginecología. Puede utilizar la copa menstrual cualquier mujer que lo desee, una vez que haya iniciado la menstruación.
Se considera que la copa menstrual es un producto seguro y aceptable aunque, pueden presentarse con su uso síntomas como dolor, irritación del canal vaginal, alergias al material y lesiones leves.
¿Puedo desarrollar el Síndrome de Shock Tóxico si utilizo la copa menstrual?
El síndrome de choque tóxico es una complicación poco frecuente de ciertos tipos de infecciones bacterianas que puede ser potencialmente mortal. Por lo general el síndrome de choque tóxico (shock séptico) se genera a causa de las toxinas producidas por la bacteria Staphylococcus aureus (estafilococo), pero la enfermedad también puede originarse por las toxinas producidas por una bacteria estreptococo del grupo A.
Puede afectar a cualquier persona, incluidos hombres, niños y mujeres posmenopáusicas.
Los factores de riesgo del síndrome de choque tóxico incluyen heridas en la piel, cirugía y uso de tampones y otros dispositivos, como copas menstruales, esponjas anticonceptivas o diafragma, pero el uso adecuado de la copa menstrual, no se ha probado que tenga correlación directa con el aumento de enfermedades infecciosas, específicamente el síndrome de shock séptico. Eso sí, se debe tener la precaución de no llevarla puesta durante más de 8 o 12 horas y mantener las medidas higiénicas.