Se dice cuando las dimensiones del clítoris son desproporcionadas con el resto de la vulva. El tamaño del clítoris puede cambiar debido a trastornos endocrinos o puede existir desde el nacimiento, resultando muy poco estético y funcional.
La hipertrofia de clítoris provoca hipersensibilidad en la zona por lo que las relaciones sexuales pueden llegar a ser molestas y dolorosas.
La solución más indicada es realizar la llamada clitoriplastia, que se basa en la reducción del clítoris o del capuchón del mismo, eliminando el exceso de piel que lo envuelve. Una intervención sencilla con la que dejarás de sentir molestias durante tus relaciones íntimas y podrás continuar con tu vida con total normalidad y sin ningún tipo de complicación externa.