Las situaciones estresantes pueden hacer que la presión arterial aumente de forma temporal. Hacer ejercicio de tres a cinco veces a la semana durante 30 minutos puede reducir su nivel de estrés. Y si tiene hipertensión arterial, hacer actividades que puedan ayudarle a controlar el estrés y mejorar su salud puede hacer una diferencia a largo plazo en la reducción de su presión arterial.
El cuerpo produce una oleada de hormonas cuando se está en una situación estresante. Estas hormonas aumentan temporalmente la presión arterial y hacen que el corazón lata más rápido y que los vasos sanguíneos se estrechen.
No hay pruebas de que el estrés por sí solo cause presión arterial alta a largo plazo. Pero reaccionar al estrés de manera poco saludable puede aumentar el riesgo de tener presión arterial alta, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Ciertas conductas están relacionadas con una presión arterial más alta, como:
– Fumar
– Beber demasiado alcohol
– Comer alimentos poco saludables
Además, las enfermedades cardíacas pueden estar asociadas a ciertos trastornos de salud relacionados con el estrés, como:
– Ansiedad
– Depresión
– Aislamiento de amigos y familiares
Pero no hay evidencia de que estos trastornos estén directamente relacionadas con la presión arterial alta. En cambio, las hormonas que produce tu cuerpo cuando estás estresado emocionalmente pueden dañar las arterias y producir una cardiopatía.
Los aumentos en la presión arterial relacionados con el estrés pueden ser drásticos. Pero cuando el estrés desaparece, la presión arterial regresa a la normalidad. Sin embargo, incluso los picos frecuentes y temporales en la presión arterial pueden dañar los vasos sanguíneos, el corazón y los riñones de una manera similar a la presión arterial alta a largo plazo.